Esta división comprende la transformación de crudo de petróleo y carbón en productos utilizables. El proceso dominante es el refino de petróleo, que consiste en la separación del crudo de petróleo en sus componentes mediante técnicas como el craqueo y la destilación.

    Esta división comprende la fabricación de gases como etano, propano y butano como productos de las refinerías de petróleo.

    Esta división comprende también la fabricación por cuenta propia de productos característicos (por ejemplo, coque, butano, propano, petróleo, queroseno, fueloil, etc.), así como los servicios de tratamiento (por ejemplo, refino por encargo).

    Esta división no comprende la fabricación de dichos gases en otras unidades (véase 20.14), la fabricación de gases industriales (véase 20.11), la extracción de gas natural (metano, etano, butano o propano) (véase 06.20) ni la producción de gas combustible distinto de los gases de petróleo para el suministro de combustibles gaseosos a través de una red permanente (por ejemplo, gas de hulla, gas de agua, gas pobre) (véase 35.21).

    La fabricación de productos petroquímicos a partir de petróleo refinado se clasifica en la división 20.

    Aquí encontramos: